Un adolescente con atrofia muscular espinal (AME) que recibió alimentación por sonda y antibióticos desarrolló un problema con la coagulación de la sangre debido a una deficiencia de vitamina K, informó un estudio de caso. "Este caso destaca que la deficiencia nutricional de vitamina K debe considerarse en pacientes pediátricos crónicos complejos cuyas necesidades nutricionales pueden no satisfacerse con una alimentación por sonda licuada en el hogar, especialmente después de un tratamiento con antibióticos", escribieron los investigadores. Además, para los pacientes que reciben alimentación por sonda licuada, "es importante tener una evaluación nutricional de... la ingesta dietética", escribió el equipo.
El estudio, "Deficiencia de vitamina K en el entorno del régimen de alimentación por sonda licuada en un adolescente: informe de un caso", se publicó en el Journal of Dietary Supplements. La atrofia muscular espinal es una rara afección genética hereditaria caracterizada por debilidad y atrofia muscular progresiva (encogimiento) que afecta principalmente a los movimientos corporales. Sin embargo, también puede afectar el habla, la respiración y la deglución.